miércoles, 24 de noviembre de 2010

Terminó de leer, he hice que lo repitiera.
Yo continuaba absorta en aquellos ojos verdes que de vez en cuando, se despegaban del texto y se clavaban en mí.
-Pero, si yo no me he inventado esta historia, y además, no la cuento tan bien.
- Elena, sigue leyendo, por favor.
Y ella frunció el ceño como cuando los niños chicos quieren decirte sin hablar y comenzó a repetir de nuevo, desde la primera palabra, ese cuento sin autora.
Yo tan solo quería besar aquellos labios de color carmín robado y lo hice. Y ella dejó entretanto resbalar los fonemas desde debajo de su lengua. Los dejó resbalar por debajo de su falda. Dejándose caer...

2 comentarios:

  1. mmmmm, interesante historia pero le veo mal final... ;)
    Merilinch

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  2. Yo sin embargo me quede con ganas de todo, cuando sigue? jajajajaja. Pintaba bien! Besitos Raki.

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